Aquí, comparto una entrevista publicada en el Diario El Pueblo el día lunes 15 de octubre de 2018
La comprensión lectora es un desafío para la educación peruana ¿Por qué resulta una tarea complicada?
La comprensión lectora es tema que nos preocupa a todos los peruanos, teniendo en cuenta que solamente el 46% de nuestros alumnos peruanos de segundo grado de primaria entienden lo que leen. Y es un desafió porque la comprensión lectora es una actividad compleja, intervienen en ella una serie de habilidades cognitivas y lingüísticas. Pero para entender mejor este proceso, nos podríamos basar en un modelo teórico, útil pero a la vez, muy simple. Justamente se llama, la concepción simple de la lectura. Este modelo plantea que para que la comprensión lectora ocurra se necesitan dos elementos. Uno de ellos es la descodificación, es decir que el niño sea capaz de leer, capaz de reconocer las palabras de forma fluida y precisa. Y, el otro elemento es la comprensión general del lenguaje, que involucran habilidades como por ejemplo tener un vocabulario profundo, tener conocimientos previos sobre el tema que estoy leyendo para poder interpretarlo adecuadamente o tener la habilidad para inferir.
¿Y en nuestras aulas se trabajan estos dos elementos?
En general, considero que se pone un especial interés en enseñarle a leer a un niño, en que aprenda a descodificar. Pero esto no es suficiente. Es decir, no basta con enseñarle a leer a un niño, es fundamental enseñarle a comprender el lenguaje oral. Y los maestros tendríamos que incluir dentro de nuestra práctica educativa la enseñanza de estas dos habilidades. Es probable que nos preocupamos más en evaluar la comprensión lectora, que en enseñarla.
Y si hablamos de enseñarle a leer a un niño, ¿cuál sería el método más adecuado?
Esa es una pregunta que siempre se suele hacer. Para responderla, hay que basarnos en lo que nos dicen los estudios sobre este aspecto; y no, en el método que está de moda o en lo que hace mi colega. Primero quiero hacer hincapié en que si algo está claro es que la lectura requiere de una enseñanza explícita y directa. Los estudios nos dicen que el método basado en las habilidades fonológicas, es decir, el que trabaja la correspondencia entre la letra y su sonido es el que resulta más eficaz. Es decir, el método fonético. En español, bastaría con que el niño aprenda a relacionar 30 grafemas – las 27 letras del alfabeto más las letras dobles “ch”, “ll” y “rr”- con sus respectivos sonidos para leer cualquier palabra, sea una palabra familiar o una palabra que a lo mejor desconoce.
¿Cuándo sería el momento ideal para aprender a leer?
Hay que tener en cuenta que hoy sabemos, gracias a los aportes de la neurociencia, que cuando aprendemos a leer, se producen cambios en nuestro cerebro y se reorganizan ciertas zonas cerebrales que no estaban inicialmente destinadas para la lectura. En cuanto a cuándo es el momento ideal, yo diría que nunca es demasiado tarde para aprender a leer. Nuestro cerebro es plástico y este aprendizaje lo podemos realizar a cualquier edad aunque puede costar más esfuerzo. Si la pregunta va más hacia a qué edad hay que enseñarle a leer a un niño, en este tema hay mucha controversia. Es difícil contestar esta pregunta porque creo que aún nos faltan datos para dar una respuesta precisa. Hay casos de niños que aprenden a leer a los cuatro años, pero este aprendizaje generalmente ha sido producto de la curiosidad del niño por querer saber qué dice en un letrero o en un afiche. Y en estos casos, no se ha visto que un aprendizaje temprano produzca daños neurológicos por empezar antes. Pero si nuestra intención es enseñarle a leer a un niño tempranamente, sí puede afectarle la motivación y el gusto por la lectura. En todo caso, el hecho de aprender a leer de forma temprana como a los cinco años, o tarde como a los siete, esto más adelante no terminará marcando demasiadas diferencias entre uno y otro.
Pero en la práctica, no es así. Actualmente, en muchos nidos o jardines de educación inicial se les enseña a los niños a leer
Es cierto y creo que responde a la presión por parte de los colegios e incluso de algunos padres que les parece acertado adelantar este aprendizaje. El problema es que probablemente por dedicarle tiempo a a la enseñanza de la lectura en la etapa inicial, no se estén atendiendo otros aprendizajes propios de esta etapa. Esto no significa que en inicial no se favorezca el aprendizaje de la lectura. Al contrario, hay que hacerlo. Por ejemplo, en inicial es importante que se desarrollen juegos con los sonidos del habla, es decir actividades de conciencia fonológica y estimular el lenguaje oral. Desarrollar la comprensión oral en la etapa inicial es esencial para más adelante, desarrollar la comprensión lectora.